En el antiguo museo pueden apreciarse objetos que dieron vida a los primeros oficios religiosos, muebles originales, objetos donados por habitantes del lugar y cuadros alegóricos.
Ermete Constanzi (18311898) fue un misionero franciscano de origen italiano que desarrolló una incansable tarea evangelizadora en el centro norte de la provincia de Santa Fe. Albañil, carpintero, herrero, agricultor y peón de campo, entre otros oficios, Constanzi aprendió la lengua de los pueblos originarios y enseñó a éstos cómo labrar la tierra. Crónicas históricas lo señalan como uno de los creadores del llamado Pueblo y Colonia Indígena de San Javier.
En 1884 creó la Reducción de San Antonio, a un kilómetro de Las Toscas, y convivió allí con más de cuatrocientos mocovíes y tobas. Un año después inició la construcción de la primera iglesia (hoy es el museo que lleva su nombre) y en 1891 emprendió edificar la segunda. Constanzi fue asesinado el 4 de enero de 1898 en una situación que nunca llegó a esclarecerse: una crónica establece que lo mandó matar un caudillo del lugar, Francisco Layana, porque Constanzi defendía a los indios que eran explotados por los terratenientes; otra señala que lo degollaron para robarle; una tercera apunta que los autores del crimen fueron oficiales de la guarnición del coronel Manuel Obligado, aunque trataron de imputar el homicidio a los indios de la zona.